Presentaciones del II Foro de Innovación y Emprendimiento de la Alianza del Pacífico

La segunda versión del Foro Lab4 se realizó en Cali, Colombia los días 29 y 30 de octubre de 2014

“Fomentar una cultura emprendedora en cada uno de los países de la Alianza del Pacifico ” es uno de los principales ejes de acción de la Alianza del Pacifico según consta en la declaración realizada por los Presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos Calderón; de Chile, Michelle Bachelet Jeria; de México, Enrique Peña Nieto, y del Perú, Ollanta Humala Tasso, durante la IX Cumbre de la Alianza del Pacífico celebrada en Punta Mita, Nayarit, México en junio de 2014.

Bajo este contexto y buscando dar continuidad a los logros obtenidos en 2013 durante el primer Foro de Emprendimiento e Innovación (LAB4) de la Alianza del Pacifico celebrado en Santiago, Chile, las agencias de promoción de Chile, Colombia, México y Perú, con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), llevaron a cabo la segunda versión del Foro Lab4 en Cali, Colombia los días 29 y 30 de octubre de 2014. El Foro contó con tres componentes: académico, social y comercial.

En la jornada académica participaron alrededor de 1200 personas incluyendo exportadores/emprendedores, compradores, inversionistas, invitados especiales y prensa. Los principales temas de esta jornada fueron: Redes para crecer en negocios innovadores, 2) Activando la industria de financiación; 3) empresas gestando empresas: emprendimiento corporativo; y 4) cultura de innovación y emprendimiento.

Además, se presentaron varios casos de éxito relacionados con el ecosistema de innovación y emprendimiento de los países de la Alianza; incluyendo avances importantes de iniciativas como Mujeres del Pacífico, la Asociación de Emprendedores de Latinoamérica (ASELA), Red de Ángeles Inversionistas y el observatorio de emprendimiento que nacieron en el primer Foro LAB4. El BID, a través del especialista Adrian Magendzo, presentó asimismo varios casos de éxito de inyección de capital que han generado un crecimiento extraordinario a las empresas beneficiadas.

El foro se complementó esta vez con un componente comercial, llevándose a cabo por primera vez una Macrorrueda de Negocios enfocada en servicios emprendedores, y con espacios simultáneos para la promoción de inversión y exportaciones.

La Macrorrueda contó con la asistencia de más de 96 exportadores/emprendedores de 73empresas de los cuatro países de la Alianza del Pacífico y 44 compradores de 39empresas procedentes de Chile, Colombia, México y Perú. Asimismo, participaron 25 inversionistas de 22 compañías procedentes de 9 países, incluyendo España, Estados Unidos y Canadá.

La jornada comercial culminó con 444 citas de negocios de las cuales 224 fueron de la rueda de inversión y 220 de la rueda de exportadores generando una expectativa total de negocios por más de ocho millones de dólares.

A continuación las presentaciones de los conferencistas del evento:

Presentaciones del II Foro de Innovación y Emprendimiento de la Alianza del Pacífico

Fuente:  http://www.iadb.org/es/temas/comercio/ii-foro-de-innovacion-y-emprendimiento,18293.html

Fuente:  http://forolab4.co/es

Monitor de Comercio e Integración 2014 del Banco Interamericano de Desarrollo (BID)

América Latina y el Caribe deben profundizar la agenda de facilitación del comercio para superar la coyuntura adversa

El Monitor de Comercio e Integración 2014 del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) analiza las causas del estancamiento de las exportaciones regionales

Tres años de estancamiento de las exportaciones de América Latina y el Caribe (ALC) hacen urgente la implementación de políticas para la facilitación del comercio, según un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) publicado hoy.

El Monitor del Comercio e Integración 2014 destaca que la baja en la demanda internacional y en los precios de muchos productos básicos exportados por la región ha puesto de manifiesto vulnerabilidades pre-existentes en el sector externo. A pesar de los esfuerzos dirigidos a diversificar las exportaciones, en el último decenio la canasta exportadora de ALC se ha concentrado en productos básicos y sus derivados, dejando la región más vulnerable al debilitamiento de los precios internacionales.

En 2013, las ventas externas de ALC aumentaron solo un 0.1 por ciento, después de haber crecido 1.2 por ciento en 2012. México y Centroamérica tuvieron crecimientos moderados (2,5 por ciento y 1,6 por ciento, respectivamente), las exportaciones de los países Andinos y de MERCOSUR se contrajeron levemente (–1,8 por ciento y –1,0 por ciento, respectivamente), y las caribeñas cayeron sustancialmente (–4,2 por ciento). Se estima que en los primeros siete meses de 2014, las exportaciones agregadas de ALC crecieron solo un 0,5 por ciento, lo que permite anticipar para el año una tasa de crecimiento inferior al 1 por ciento.

El Monitor argumenta que dada la incertidumbre sobre las negociaciones multilaterales en materia de facilitación del comercio, los países de ALC deben implementar reformas unilaterales y otras medidas en el ámbito de los acuerdos preferenciales regionales para relanzar las exportaciones. El informe indica que la región tiene un trecho importante por recorrer. En una medición conservadora, solo el 20 por ciento de los compromisos del Acuerdo sobre Facilitación del Comercio negociados en la Organización Mundial del Comercio están ya vigentes en acuerdos preferenciales de ALC.

El informe incluye un reporte detallado de los indicadores del desempeño comercial reciente de los 26 países miembros prestatarios del BID, y perfiles de los acuerdos de libre comercio vigentes. El Monitor hace parte de la serie anual de informes que estudian la evolución de la integración de ALC dentro del sistema global de comercio utilizando datos sistematizados y disponibles en la base de datos INTrade.

Fuente: http://www.iadb.org/es/noticias/comunicados-de-prensa/2014-10-22/monitor-del-comercio-e-integracion-2014,10950.html

Fábricas Sincronizadas: América Latina y el Caribe en la era de las Cadenas Globales de Valor

El surgimiento de las cadenas globales de valor está permitiendo que las naciones que se vinculan a ellas se industrialicen a un ritmo mucho más acelerado que el que necesitarían desarrollando cadenas domésticas completas. Además de crear oportunidades para diversificar la producción y el comercio, la participación en estas cadenas globales permite que los países capturen algunas de las ganancias asociadas al bien manufacturado en la cadena sin tener que poseer habilidades en todas sus etapas de producción.

A pesar de estos potenciales beneficios, muy poco países en América Latina y el Caribe están aprovechando estas nuevas tendencias en la organización internacional de la producción.

Este reporte presenta inicialmente un panorama muy completo del nivel de participación de los países de la región en las cadenas globales de valor vis à vis otras regiones del mundo. Posteriormente se examinan los principales factores que subyacen a las tasas de participación observadas, para concluir con una serie de propuestas de política.

Descargue el reporte :

Fábricas Sincronizadas: América Latina y el Cariba en la era de las Cadenas Globales de Valor

 

Fuente:  http://publications.iadb.org/handle/11319/6668?locale-attribute=es&

Presentan libro FOMIN/BID y Fundación Telefónica acerca de las TIC en las PYMES

 

 El pasado martes 28 de Octubre, el Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Fundación Telefónica, lanzaron el libro «Lecciones aprendidas sobre adopción de TIC en PYMES: La experiencia del FOMIN/BID en América Latina».

El evento fue realizado desde la academia Wayra de Venezuela.

El libro resalta lecciones aprendidas de una muestra de nueve proyectos que comprueban el rol de las TIC en el fomento de la innovación y mejoramiento de la eficiencia, competitividad y acceso a mercados de PYMES en la Región.

El lanzamiento fue transmitido via streaming, en éste estuvieron presentes las siguientes personalidades: Valentina Ríos, gerente general de Fundación Telefónica Venezuela, Luis Benatuil, vicepresidente de Planificación Estratégica de Telefónica Venezolana, Badouin Duquesne, representante del BID en el país y Francisco Estrázulas, especialista de la Unidad de Comercio e Inversión del Sector Integración y Comercio del BID.

Puede descargar la publicación en el siguiente enlace: http://bit.ly/1pVMI2a

Los casos presentados en la publicación son los siguientes:

  1. Desarrollo de la factura electrónica y portal tributario para las micro, pequeñas y medianas empresas de Chile.
  2. Desarrollo de oportunidades de comercio electrónico para las PYMES en la región Santa Cruz
  3. Mejorando la gestión y la productividad del sistema de salud de Uruguay:FEMI Salud Digital
  4. Apoyando la competitividad internacional de las PYMES de software
  5. Apoyo al desempeño empresarial mediante el uso de Tecnologías de Información y Comunicaciones: Proyecto Prymeros.
  6. Fortalecimiento de la cadena de producción de artesanías de la región Puno
  7. Nuevas tecnologías aplicadas a la gestión ambiental en las PyMES argentinas productoras de frutas: FruTIC
  8. Innovaciones de TIC para el desarrollo de ecoempresas agrícolas y forestales en América Central
  9. Una solución en TIC para el fortalecimiento del modelo de negocio de las PYMES del sector farmacia

Fuente: http://www.fomin.org/pymespracticas/Noticias/ArtMID/4117/ArticleID/2701/Presentan-libro-FOMINBID-y-Fundaci243n-Telef243nica-acerca-de-las-TIC-en-las-PyMES.aspx

El estado de la innovación en América Latina

Para entender las condiciones alrededor de la innovación en América Latina en detalle, la empresa de consultoría Insitum llevó a cabo un estudio cualitativo y cuantitativo con más de 300 de las mayores organizaciones de la región. La investigación revela datos, barreras, necesidades y resultados alrededor de la innovación en las organizaciones latinoamericanas.

Un primer aspecto que resalta la investigación es que “Innovación” se convirtió en una palabra de moda. Su significado es ambiguo y su uso excesivo ha generado una confusión capaz de anular su sentido. En América Latina, los medios están utilizando el término más que nunca, los consultores lo definen de diferentes formas, suele malinterpretarse y las compañías no lo usan como una herramienta de marketing efectiva. Ante este panorama, es urgente tener claridad al respecto.

Respecto al estado de la innovación y los retos del futuro para los países latinoamericanos, la investigación apunta que están dadas las condiciones para el desarrollo de la innovación, pero no será de la misma manera que sucede en otras partes del mundo. Lamentablemente, hay muy poco expertise o valoración en torno a la innovación dentro de las grandes organizaciones latinoamericanas, y la mayor parte de los estudios globales de innovación (p. ej. BCG, PwC, IBM) incluyen solamente, y en raras ocasiones, a algunos países de la región. Algunos de estos estudios sólo consideran la visión del CEO, cuando en realidad la visión del CEO puede ser bastante diferente de la del equipo directivo.

Otro punto destacado es que la mayoría de las empresas ya están convencidas de los beneficios de la innovación, y están pasando de lo que llamaríamos la Fase 0 (¿Por qué innovar?) a la Fase 1 (¿Cómo implementar la innovación?). Esto trae aparejada otra serie de desafíos, oportunidades y frustraciones ya que las compañías pasan del ‘pensamiento’ a la ‘acción’.

Asimismo, las empresas multinacionales con filiales en América Latina parecen estar mucho más adelantadas que las multilatinas de la región en cuanto a la adaptación de procesos y métodos de innovación dentro de sus organizaciones.

Ambos tipos de compañías todavía se muestran reticentes a invertir los recursos adecuados para tareas de innovación, lo que lleva a buscar formas ingeniosas para reunir los recursos necesarios, como la redistribución de recursos de otras áreas (de investigación de mercado, publicidad o capacitación) para financiar, complementar o iniciar tareas de innovación.

La principal prioridad dentro de las organizaciones es la necesidad de desarrollar capacidades internas, procesos de trabajo y herramientas, así como también una cultura de innovación de largo plazo que les permita a estar más abiertas a probar nuevas ideas, sin importar si funcionan o no.

Otro punto que destaca el estudio precisa que trabajar en una compañía que innova tiene un ‘efecto halo’ en sus empleados y en futuros empleados; por este motivo, trabajar en organizaciones que innovan pasa a ser un factor clave para atraer y retener talento, generalmente en mercados laborales de escasos recursos o altamente competitivos.

Muchas áreas dentro de las organizaciones parecen haber adoptado iniciativas de innovación. ‘Marketing’ parece ser la más activa debido a: 1) su enfoque obsesivo en los insights del consumidor y 2) que hoy los líderes de esta área muchas veces son responsables del diseño del producto, servicio o experiencia del cliente cuando en el pasado estaban probablemente más enfocados en tareas de branding, comunicación y promoción.

Los resultados de la encuesta muestran que hay una mirada positiva y mucho entusiasmo con respecto a hacer innovación, pero América Latina todavía necesita crear las condiciones adecuadas para que se financien y se lleven adelante tareas de este tipo en un nivel más amplio. Específicamente, las compañías necesitan encontrar formas que permitan la coexistencia de culturas de innovación dentro de las culturas de aversión al riesgo de la típica gestión empresarial, y desarrollar más conocimientos en torno a estrategias, procesos y herramientas de innovación.

Según la investigación de Insitum, América Latina va por el camino correcto, pero para mejorar la capacidad innovadora y la competitividad de organizaciones latinoamericanas se debe apostar fuerte a la expansión de estas capacidades.

Puede descargar el informe completo desde aquí (PDF)

Fuente: http://www.innovacion.cl/2014/10/el-estado-de-la-innovacion-en-america-latina/

Emprendedores: Creadores de crecimiento

América Latina desborda de potenciales emprendedores, pero no se está haciendo lo suficiente para promoverlos.

Publicado por Latin Trade
Desde vendedores callejeros hasta empresas multinacionales, América Latina ofrece multitud de historias exitosas de emprendedores. Ahora muchos de los gobiernos y dirigentes empresarios de la región opinan que deben hacer más para promover nuevos proyectos e impulsar de esa forma el crecimiento económico futuro.

En México, la creación de 50 grandes empresas por año podría incrementar el Producto Interno Bruto (PIB) en un 1 por ciento, según Endeavor, una organización internacional que promueve el crecimiento a través de los emprendedores. En Brasil, más de la mitad de la fuerza de trabajo formal del país se desempeña en pequeños negocios, dice Sabrae, una entidad que les brinda apoyo.

Cada vez más los latinoamericanos miran al emprendimiento como una opción de carrera. En Colombia, el 57 por ciento de la población de entre 18 y 64 años planea iniciar un negocio en los próximos tres años, frente al 13 por ciento en Estados Unidos, según muestran las últimas proyecciones del Global Entrepreneurship Monitor.

Aunque el dinamismo de los negocios en América Latina es sorprendente, la región todavía necesita un ambiente más amigable para los emprendedores. Las nuevas empresas frecuentemente se enfrentan a obstáculos mayores a los que deben superar sus pares en los países desarrollados, incluyendo una excesiva burocracia y la falta de capital de riesgo de origen privado. La cantidad de días que se necesitan en promedio en la región para comenzar un nuevo negocio es de 53, más de cuatro veces de lo que se requiere en los países industrializados, dice el Banco Mundial.

Pero mientras que el marco regulatorio podría ser más favorable para desarrollar y consolidar un negocio, atraer y desarrollar el capital humano son los factores clave para crear nuevas empresas y empleos en la próxima década. Algunos gobiernos tomaron la delantera en esto y crearon programas para atraer emprendedores altamente innovadores de todo el mundo, incluso aquellos que están tratando de que sus proyectos despeguen en Estados Unidos y Europa debido a la crisis financiera y las leyes migratorias que frecuentemente excluyen —en lugar de atraer— al talento extranjero.

En Chile, el gobierno espera que Startup Chile convierta al país en el centro de desarrollo de emprendedores de América Latina. Lanzado en 2010, les ofrece US$40.000 de capital y una visa por un año a quienes quieran desarrollar allí sus proyectos de empresas innovadoras. El programa pretende haber apoyado a 1.000 emprendedores para fines del año próximo.

Entidades sin fines de lucro, frecuentemente gerenciadas por empresarios, también fomentan el espíritu emprendedor, dando asistencia a jóvenes y a negocios que están en su fase inicial. Un ejemplo es Junior Achievement, una organización estadounidense que busca desarrollar las habilidades empresarias en todo el mundo. Junior Achievement les brinda a jóvenes de entre 15 y 25 años la oportunidad de iniciar una pequeña compañía y recibir asesoría de dirigentes empresarios locales.

Mientras algunos participantes desarrollan sus negocios al finalizar el programa, los que no lo hacen se benefician igualmente por incorporar conocimientos que pueden ayudar a sus futuros empleadores a ser más competitivos. “Simplemente por haber pasado por estos programas, la mayor parte de estos jóvenes terminan listos para integrar la fuerza de trabajo”, dice Rush. “Ellos desarrollan habilidades que les permitirán tener un alto nivel de eficiencia como empleados”, agrega.

Endeavor es otra entidad que impulsa a los emprendedores. Andy Freire, un reconocido empresario argentino y presidente del capítulo de la entidad en el país suramericano, dice que aunque no existe una receta mágica que garantice el éxito empresario, el desarrollo de emprendedores “de alto impacto” será clave para la creación de puestos de trabajo y un mayor crecimiento de América Latina.

En contraste con otro tipo de emprendedores, incluso muchos de los que manejan microempresas, los de alto impacto son individuos que construyen firmas que generan ingresos por millones y emplean a cientos de personas. “Los emprendedores de alto impacto pueden mover y transformar una industria, o cambiar drásticamente un país”, dice Freire.

Para impulsar emprendimientos de alto impacto, Freire apunta a la necesidad de mejores mentores y mejores niveles educativos. “Hay un enorme espíritu emprendedor, muchísima gente que comienza sus propios negocios, pero muy pocos tienen éxito y eso depende de la educación”, opina. Las universidades latinoamericanas, por ejemplo, podrían desempeñar un papel destacado en generar más emprendedores, agrega Freire.

“Se necesita un enfoque holístico para reducir el nivel de obstáculos que deben superar los emprendedores y al mismo tiempo hay que alentarlos a saltar más alto”, concluye.

Ryan Dube informó desde Lima.

Fuente: http://connectamericas.com/es/content/creadores-de-crecimiento

Franquicias: Producto de exportación

¿Está América Latina dejando de ser receptora de franquicias para convertirse en exportadora? Muchos emprendedores están haciendo crecer sus marcas a través de este tipo de negocio.

Publicado por Latin Trade

 “Absolutamente….”, es la respuesta contundente que da a Latin Trade Lucas Secades, director ejecutivo de la Asociación Argentina de Marcas y Franquicias cuando se le pregunta si América Latina ya dejó de ser receptora de franquicias y se ha convertido en una exportadora.

Con respuestas que van desde la cautela hasta el optimismo militante, los distintos interlocutores del mundo de las franquicias hablan con pasión del tema.

“Los primeros que salieron al exterior fueron los estadounidenses y así comenzó a implantarse en los distintos países el concepto de franchising”, explica. Ese desembarco fue en la década de 1990, aunque desde hacía cierto tiempo ya había ejemplos incipientes en la región, como McDonald’s. Pocos años más tarde, emprendedores locales con negocios innovadores y exitosos en sus países empezaron a ver las franquicias como el método para cruzar las fronteras. Y ahí comenzaron las marcas latinoamericanas a aventurarse en territorios poco conocidos y a abandonar los límites protegidos de sus propios mercados.

“Existe una madurez relativa del sector en algunos países que hace que algunas marcas ya estén exportando o en proceso de exportar —dice desde el extremo norte del continente Diego Elizarrarás Cerda, presidente de la Asociación Mexicana de Franquicias—. Es recurrente que el inicio de las franquicias se da con la llegada de las marcas extranjeras. Posteriormente, las marcas nacionales, líderes, empiezan a copiar el modelo. Con el paso de los años, termina siendo un fenómeno de pymes. En este punto, la mayoría de las franquicias son nacionales y es aquí donde se cuenta ya con algunas marcas consolidadas y conceptos originales para exportar a otros países”, agrega.

En efecto, según los porcentajes que maneja la Federación Iberoamericana de Franquicias (Fiaf), con sede en Valencia, España, los tres países con mayor desarrollo del sector en América Latina —Brasil, México y Argentina— adoptaron este tipo de negocio y cuentan con un elevadísimo porcentaje de franquicias nacionales en su mercado. En el caso de Brasil, el 95 por ciento; en Argentina, el 90 por ciento, y en México, el 84 por ciento. Este éxito también alienta a empresas y emprendedores a expandirse en el exterior comercializando su propia marca en forma de franquicia.

Ejemplos emblemáticos

Los ejemplos de franquicias exitosas y de exportación abundan. La tradicional fábrica de alfajores Havanna, un clásico argentino, se reconvirtió en cuidadas cafeterías que ofrecen chocolates, dulces y alfajores, todo ello arropado en un trabajo muy fino de marketing y de marca. Havanna hoy tiene 75 puntos de venta fuera de Argentina con presencia en casi toda América Latina, Estados Unidos, Israel y España, de la mano de sus franquicias. En Argentina llega a las 200 cafeterías, entre propias y franquiciadas.

Otro caso emblemático y, con doble mérito, es el del lavadero móvil de vehículos Pronto Wash. La empresa nació en diciembre de 2001, en momentos en que la economía argentina estallaba en pedazos y producía centenares de quiebras de empresas y millones de desocupados.

Doce años más tarde, Pronto Wash tiene 400 franquicias distribuidas en 30 países de cuatro continentes y es la compañía latinoamericana de mayor crecimiento en el sector de las franquicias a nivel mundial, según sus propias palabras.

El concepto sobre el cual se desarrolló la empresa es brindar el servicio de lavado del automóvil mientras el cliente está realizando otra actividad. Por eso los lugares por excelencia son los estacionamientos de los shoppings o de los cines. Y el segundo concepto novedoso que ofrece es el bajo nivel de consumo de agua: menos de cinco litros por auto. Así, los simpáticos carritos amarillo y negro ganaron posiciones en el mundo, brindando seis servicios básicos y cuatro especiales.

En Brasil cuesta elegir los casos exitosos entre la abundancia que muestra su formidable mercado. El instituto Fisk —brasileño a pesar del nombre— llevó sus cursos de inglés, español, portugués e informática a ultramar y se cansa de acumular premios a la excelencia. Comenzó desarrollando un método propio de enseñanza de inglés a partir de la experiencia de su fundador Richard Fisk (en Brasil), y hoy sus franquicias no solo están en la región: se las encuentra en América del Norte, Asia e incluso África. En Argentina tiene 59 centros y en Japón 11. Su total es de 863 unidades, de ellas, 108 en el exterior.

O Boticário es otro éxito de las franquicias brasileñas. Si bien a nivel internacional su presencia se limita a ocho países, en ellos tiene 368 puntos de ventas y 59 tiendas exclusivas. La empresa se presenta como “la mayor red de franquicias de perfumería y cosméticos del mundo” y una de las primeras en Brasil en adoptar el sistema. Aún en su propio territorio, los números de O Boticário son para el asombro: tiene más de 950 franquicias que cuentan con 3.353 puntos de ventas en Brasil.

Siguiendo con los éxitos de exportación, Localiza es otro golazo brasileño. Se trata de la mayor red de alquiler de autos de América Latina, con franquicias en las principales ciudades de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay, más allá de las que tiene en Brasil. En total tiene presencia en 352 ciudades, a través de 513 agencias (49 en el exterior).

México

México junto con Brasil y Argentina comparte el podio como uno de los grandes mercados de franquicias. Y para quienes descreen de la creatividad latinoamericana, Kidzania es un ejemplo destacable. Es un parque temático pensado para niños de 4 a 12 años, “en los que juegan a ser adultos” en una ciudad a escala infantil.

Kidzania nació en México en 1996 de la mano del empresario Xavier López Ancona y se presenta como “la empresa líder en entretenimiento educativo para niños”. En la actualidad tiene franquicias en Japón, Indonesia, Portugal, Emiratos Árabes, Corea del Sur, Malasia, Chile, Arabia, Tailandia, Kuwait, Rusia, Egipto, India, Turquía, además de Brasil y Chile en la región.

Las próximas licencias exclusivas, previstas para entrar en operación en 2014, serán en Singapur, Moscú y Manila. Y, para 2015, siguen Londres y Estados Unidos.

La medicina tampoco está ajena al mundo de las franquicias. Y tiene marcas exponentes tanto en el área de provisión de medicamentos (como las Farmacias GI y las Farmacias del Ahorro, con gran despliegue local pero poca salida internacional) como de servicios médicos.

El Banco de Cordón Umbilical es una empresa mexicana de biotecnología que se dedica a la criopreservación de células madre del cordón umbilical. Tiene poco más de diez años de vida pero ya cuenta con 25 sucursales franquiciadas, algunas de ellas en Argentina, Brasil, Colombia y Estados Unidos y presencia en 70 ciudades.

Es el primer banco privado de su especie en América Latina y el servicio que brinda esta franquicia es de almacenaje de células madre del cordón umbilical del recién nacido, una técnica que se considera la más avanzada para un tratamiento efectivo de enfermedades graves que pueda sufrir durante su vida la persona, como leucemias, anemias, parálisis cerebral o tumores.

Perú

La emergente economía peruana tampoco se queda atrás en esta carrera de franquicias latinoamericanas. De ser un país con un 65 por ciento de marcas extranjeras en las franquicias existentes en el país, hace poco comenzó a exportar las propias a través de su gastronomía.

“Perú tiene la segunda gastronomía del mundo después de Francia. Entonces empezaron a aprovecharla —dice a Latin Trade Carlos Canudas, contador, especialista en franquicias y un apasionado del tema—. Pero no es la gastronomía del fast-food”, aclara. Son restaurantes de alto nivel, como Astrid y Gastón, Osaka o la Rosa Náutica que revalorizaron la cocina peruana en el mundo de la gastronomía internacional.

Exportación exitosa de franquicias

En Argentina, según datos del Estudio Canudas, el 54 por ciento de las marcas que exportan sus franquicias son de indumentaria, y le siguen los servicios y la gastronomía. “Cuando cubriste tu país comienzas a crecer afuera”, dice Canudas. Y lo natural es que los primeros pasos se den en los países vecinos. “Todo el mundo quiere llegar a Estados Unidos. Por decir ‘estoy en Estados Unidos’. Pero estar allí implica 22 legislaciones diferentes, según los estados. Es muy complejo”, opina.

Elizarrarás Cerda, de la Asociación Mexicana de Franquicias, coincide. “Estados Unidos está en la mente de muchas marcas como el destino ideal, dejando de lado lo complicado de la estructura legal y la competencia del mercado”, dice. Pero América Latina presenta similitud de mercados, además del idioma y las estructuras legales y comerciales, factores que la vuelven más atractiva cuando una franquicia busca expandirse en otros países.

No obstante, dentro de las similitudes, los países de América Latina presentan también diferencias. Por ejemplo en gustos y en talles. “Bolivia, Chile y Perú tienen una fuerte ascendencia americana en el gusto— dice Canudas—. Entonces, es muy probable que una marca peruana haga su primera experiencia en Chile”, agrega.

En el caso de la exportación de franquicias argentinas de ropa, Canudas explica que no solo hubo que “tropicalizar” los colores (en el país las preferencias eran hacia tonos más conservadores) sino ampliar la política de talles. Y también agrega que la exportación de franquicias en este rubro tuvo un recorrido diferente: los turistas latinoamericanos llegaban a Buenos Aires en busca de diseño. Entonces “en vez de nosotros salir a exportar, nos venían a comprar”, dice. Así llegaron las principales marcas argentinas de ropa a las tiendas de Paraguay y Uruguay. “En el shopping Pinedo (de Paraguay) 51 marcas sobre 150 son argentinas”, resume.

Los expertos no dejan de insistir en que lo crucial de una franquicia exitosa es contar con un “concepto, un producto o servicio que marque la diferencia”. Y a ese producto o proceso no le puede faltar empaque, marketing y desarrollo de marca. Una marca de lencería es claro ejemplo de ello. “Una firma como Caro Cuore no vende más ropa interior. Vende sensualidad. Entras en el local y hay perfume en el ambiente. La música es especial. Lo que ves, lo que oyes, lo que tocas es especial. Es un concepto”, dice Canudas.

Y después, la compradora se lleva las prendas en un envoltorio grande y llamativo. Marketing a full, algo que los argentinos aparentemente desarrollan muy bien. “Es un tema de percepción. Te sientes de nivel por usar ropa Caro Cuore”.

Claves para el éxito

Secades, de la Asociación Argentina de Marcas y Franquicias, enumera cuatro características fundamentales para que una franquicia tenga éxito fuera de sus fronteras.

  • Ser una empresa sólida
  • Contar con una organización profesional a nivel local
  • Tener un producto o servicio que sea diferente
  • Que esa diferenciación sea atractiva en otros mercados

Y lo resume en la frase “Pensar globalmente, actuar localmente”. Los expertos coinciden en la importancia que tiene para la promoción y exportación de las franquicias el respaldo de los gobiernos. Y en ese aspecto, Secades y Canudas destacan el respaldo que las autoridades de México, Brasil e incluso Venezuela le dan al sector, a diferencia de la Argentina.

Boticario Latin Trade

Pero, dentro de este fervor por las franquicias, se alzan algunas voces de alerta. Desde México, otro especialista en el tema, el abogado Rafael Giménez Camacho, expresa su preocupación sobre las leyes que regulan al sector en la región —o la falta de ellas en algunos casos— y cómo esto puede derivar en abusos de parte de quienes venden las franquicias. “Cualquier empresa puede franquiciar. No importa si tiene experiencia o no, si tiene historial o con qué capital social cuenta —explica—. La mayor parte de los problemas legales es porque las franquicias son improvisadas, no transmiten un negocio que ya ha sido probado”.

Algunos países tienen legislaciones específicas y otros están avanzando en ellas. Mientras tanto, el respaldo institucional de los gobiernos ya se advierte en la promoción que hacen del sector. En el caso de Brasil y México existe una política decidida de promoción que se refleja en las gigantescas ferias internacionales que organizan cada año. La mexicana —en marzo—, es la más importante de habla hispana, superando a la que tradicionalmente se hacía en Valencia, España. Y la brasileña —en São Paulo, en junio— es la más importante del mundo.

Y al compás de los tiempos que corren, a partir del 26 de mayo y hasta el 14 de junio se realizará la Primera Feria Virtual de Franquicias Iberoamericana.

Toda esta ferviente actividad se sustenta en las cifras de crecimiento del sector.

Como lo resume Canudas, América Latina está creciendo a un ritmo del 3,6 por ciento, pero las franquicias superan el 10 por ciento anual. Y en Perú, la cifra no baja del 20 por ciento.

Elida Bustos informó desde Buenos Aires

Fuente: http://connectamericas.com/es/content/producto-de-exportaci%C3%B3n

Estudio del BID propone una nueva generación de políticas de desarrollo para impulsar el crecimiento de América Latina y el Caribe

El trabajo ofrece un marco conceptual para ayudar a que las autoridades transformen las políticas industriales en instrumentos eficaces para aumentar la productividad

CIUDAD DE MÉXICO –Teniendo en cuenta el largo historial de políticas industriales en América Latina que, a menudo, han causado en América Latina más daños que beneficios, un nuevo estudio del Banco Interamericano de Desarrollo plantea cuándo y cómo pueden intervenir los gobiernos en la economía para incrementar la productividad minimizando, al mismo tiempo, los riesgos de repetir los errores del pasado.

En Desarrollo en las Américas, la publicacióninsignia del BID, los expertos estudiaron políticas industriales implementadas en todo el mundo, tanto exitosas como fallidas, a fin de forjar un marco de análisis práctico y con visión de futuro que ayude a las autoridades a encontrar la combinación apropiada de políticas de desarrollo productivo, tomando en cuenta las realidades de cada país.

“Las políticas industriales han caído en descrédito porque han tendido a conllevar favoritismos políticos, derroche de recursos, búsqueda de rentas y corrupción”, dijo Santiago Levy, Vicepresidente de Conocimiento y Sectores del BID. “Sin embargo, creemos que toda vez que las instituciones apropiadas estén establecidas, bajo ciertas circunstancias las intervenciones públicas bien concebidas pueden ayudar a aumentar la productividad, para lo cual estamos ofreciendo un nuevo marco conceptual”.

Si bien durante el pasado decenio ha habido un considerable progreso económico y social en América Latina y el Caribe, en materia de aumento de la productividad, la región aún se encuentra a la zaga de países más prósperos, lo que explica los niveles más bajos de ingreso y bienestar. De hecho, la creación de condiciones propicias para el aumento de la productividad es uno de los principales retos de desarrollo que hoy día enfrentan las autoridades de la región.

Es sabido que los gobiernos están llamados a desempeñar un importante papel de ayudar al sector privado a tornarse más competitivo en el ámbito de la economía mundial, pero el historial de costosos fracasos en la región –desde la industria de la informática en el Brasil hasta los productores de arroz en Costa Rica– ha llevado a que la política industrial se considere un exceso del sector público.

Este innovador estudio –titulado ¿Cómo repensar el desarrollo productivo? Políticas e instituciones sólidas para la transformación económica– ayuda a las autoridades a determinar en qué condiciones es útil intervenir y, en caso de intervención, cuáles son los mejores instrumentos para llevarla a cabo.

Los gobiernos deben plantearse cuál es la falla de mercado que tratan de atender con una nueva política, qué instrumentos deben emplearse para subsanarla y, crucialmente, qué clase de instituciones se necesitan para implementar la política con éxito. Habida cuenta de las circunstancias singulares de cada economía, en lugar de estudiar e imitar las mejores prácticas, las autoridades deben escoger las políticas de mejor adecuación a las capacidades institucionales de la economía.

En el libro se manejan los mejores datos disponibles y se formula una metodología para que los gobiernos de América Latina y el Caribe puedan repensar las políticas de desarrollo productivo orientadas a la integración con cadenas de valor mundiales, generar innovación, mejorar el capital humano, fomentar la formación de empresas y promover la internacionalización, con los sectores público y privado trabajando juntos.

Los siguientes son algunos de los temas tratados en el estudio:

  • ¿Por qué un enfoque de “mejores prácticas” aplicado a las políticas de desarrollo productivo es erróneo?
  • ¿Por qué a los países asiáticos les fue mejor que a los latinoamericanos en la aplicación de políticas industriales?
  • ¿Los gobiernos deben ayudar a las empresas pequeñas y medianas?
  • ¿Cómo funcionaría una promoción exitosa de las exportaciones?
  • ¿Cómo enfrentar el problema del oportunismo (“free riding”) de quienes se benefician de los riesgos iniciales asumidos por los pioneros una vez que tienen éxito?

En el estudio abundan los estudios de casos, entre ellos:

  • El contraste entre las políticas brasileñas de apoyo a Embraer y al sector informático
  • Cómo Costa Rica generó una industria totalmente nueva en insumos médicos
  • Cómo el estado mexicano de Durango logró conquistar empresas extranjeras de autopartes
  • Por qué la intervención en los mercados del arroz rindió resultados en la Argentina pero fracasó en Costa Rica.

“Este no es un libro ideológico”, dijo José Juan Ruiz, Economista Jefe del BID. “Está basado en análisis y evidencia. Más y más, el dilema no es si se deben aplicar políticas de desarrollo productivo, sino cómo se las pone en práctica. Las políticas sólidas exigirán nuevas funciones de las agencias públicas y una participación más activa del estado en conjunto con el sector privado”.

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Fuente: http://www.iadb.org/es/noticias/comunicados-de-prensa/2014-09-18/10902.html